domingo, 28 de junio de 2009

Los cariocas no jugarán el mundial

Por Naara Rudá
(Brasil)
"En julio de 2008, un madrileño fue vivir en una isla lejana, del otro lado del Océano. En ella, el cielo era más azul, los árboles más verdes y las personas más amables. Todo sería perfecto si este español, aficionado al fútbol, pudiera ver a los partidos de la Eurocopa. Claro que ninguna emisora de la islota trasmitía los partidos de España y no había más que hacer sino esperar al día siguiente para leer, en un periódico local, el resultado de los partidos. Después de una noche mal dormida, el madrileño corrió hasta el primer quiosco y compró el mayor periódico de la isla. En la página de deportes, el titular era gigantesco: “Selección catalana juega bien y vence”.

El viajero no podía creer lo que veía. Compró otro periódico. El titular de deportes decía: “España encanta y vence“. Sin embargo, en el texto… “Los principales jugadores del partido fueron Senna y Villa. Los futbolistas catalanes pudieron mostrar su fuerza y habilidad ante los adversarios…”.

“Catalanes, ¡no!”, gritó. El madrileño intentó explicarse, pero fue considerado un prejuicioso. ¿Por qué él se ofendía con un simple cambio de Comunidad? ¿Tendría él algo contra Cataluña? De ninguna manera. A él le encantaba el Barça y, como buen arquitecto, la obra de Gaudí. Sin embargo, no estaba de acuerdo con el error. Pero ninguno de los bárbaros de la islota hizo caso a sus peticiones. El fin de la historia tuvo lugar cuando un navío catalán, éste sí catalán, pasó por el local y llevó al ya desesperado español. Y todos los habitantes de la isla se aseguraron de que él era realmente catalán.

Cuentos aparte, ésta es la sensación de cualquier turista o inmigrante de Brasil cuando llega a España. ¿Por qué los españoles siguen utilizando la palabra carioca como sinónimo de brasileño? La islota de la historia puede ser perdonada por su falta de comunicación con el exterior. ¡Pero no España!

Los cariocas son los nacidos en la ciudad brasileña del Río de Janeiro y nada más. No alcanzan ni la población de todo el Estado, que posee como gentilicio el nombre "fluminense" . Un ejemplo fácil: los nacidos en España son españoles. Los nacidos en Castilla-La Mancha son españoles y manchegos. Los nacidos en Toledo son españoles, castellanomanchegos y toledanos. Los nacidos en la ciudad del Río de Janeiro son brasileños, fluminenses y cariocas. Los nacidos en Sao Paulo, Espirito Santo, Bahía o cualquier otra parte de Brasil que no sea la ciudad del Río de Janeiro no son cariocas. No es difícil de entender, ¿verdad?

El simple error de gentilicio suena aún peor transportado para las gigantescas dimensiones de Brasil y sus 188.098.127 habitantes. De esos, 15.383.407 son fluminenses y solamente 6.094.183 cariocas. Eso sí, cariocas de verdad. Afortunados seres que viven luego abajo del Cristo Redentor y cerca de las hermosas playas de Copacabana e Ipanema.

Hablando de fútbol, cabe aclarar que Ronaldo es carioca, pero Ronaldinho, no. Y tampoco Kaká, Rivaldo, Roberto Carlos o el Rey Pelé. De la misma manera, el Flamengo es un equipo carioca. Pero no El Sao Paulo, el Corinthians, el Gremio y ni mucho menos la selección brasileña. Y, claro, esta sí jugará el Mundial de 2010.

Sin embargo, hay un hecho que pone en duda la real procedencia de los cariocas: la etimología de la palabra. Carioca es originario de Karí Oca, o “la casa del hombre blanco” en tupí-guaraní (un idioma indígena brasileño). En ese caso, salta la duda. ¿Serían los austríacos, o los suecos, más cariocas que los propios cariocas? Que se lo expliquen a los chicos del AS y el MARCA".

2 comentarios:

  1. qué notable contribución este blog... excelente, nada más que decir... Saludos de Chile.

    ResponderEliminar
  2. Me encantó la nota porque se ha clarificado la mala utilización del nombre de carioca para denominar a los brasileños y desacertado también cuando cometemos el error de decir gallegos a los españoles y son realmente de Galicia. Es como nombrar a los argentinos como porteños. Trataré de divulgarlo en el medio donde me desempeño. Ruben, de Victoria, Entre Ríos

    ResponderEliminar